Octavas Palabras: El Destino existe

EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE
EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE
EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE EXISTE

 

Y esta es la canción que me dedico...

 



De Destino para Mí.

¡Es que hizo de las suyas otra vez!
Volví a escribir una entrada super larga, con toda mi opinion y mi dolor, ¡y él volvió a borrarla! Había pasado una vez anterior en mi otro blog, esa vez sobre mi hermano.
Muchos dirán si se enteran de la situación, "era obvio" y que eso no puede llamarse Destino, pero a mí me importa poco. Yo... prefiero creer que él me odia a que yo solo soy una tonta.

Esta bien, así esta bien... Y solo me queda por decir un pensamiento sobre el Destino:

Lo que me tratabas de decir... 

Eres aquel que no habla, que actúa. Eres aquel que no habla, que escucha. Eres aquella existencia que no puedo ver, pero se me permite sentir.

O tal vez no. Es mi egocentrismo hablando, lo siento.

Y son esas palabras egocéntricas, y esas disculpas al aire, lo que me diferencian de ti.

Tú no hablas, tú actúas. Tú no hablas, pero si me escuchas. Sabes la horrible persona que soy, lo cruel e hipócrita que soy.

Por eso, por ser tú, sabías que el saberlo te dictaba a actuar. Por eso, por ser tú, sabías que hacer conmigo.

Trataste de advertirme, de actuar bajo el menor riesgo, pero me negué a entender. Hoy, tus acciones me han golpeado y por fin puedo escuchar lo que tratabas de decirme… "Te odio".