Veintidos Palabras: Un pedido cumplido y un humor destrozado

Porque lo último que pedí a Destino en mi entrada anteior, "dejanos vernos a todos juntos una vez más", se cumplió el mismo día. Pero no por ello, cuando me di cuenta, mi humor mejoró. Porque me di cuenta cuando estaba en problemas con mi papá.

Admito mi culpa en el problema, pero esta vez, debo decirlo: la mayoría de la culpa fue de mi papá.

Yo... el martes no estaba seguro si tendríamos clases. Al parecer solo estaban dejando entrar a los que tuvieran cosas importantes que hacer. Por lo que yo y mis amigos no entramos. De por sí teníamos pocas cosas que hacer y en face nos estabamos poniendo de acuerdo para faltar a las pocas clases que nos tocaban (no solo mis amigos, todo el grupo).
Entonces mis amigos y yo nos reunimos frente a la escuela y pasamos el día juntos.
Primero un rato en la plaza de enfrente,después fuimos a la Plaza (entiendan que es diferente por la mayúscula) y vimos una película. Por el camino lucharon por sacarme de la librería del Sanborns (su culpa, ellos entraron primero sin saber a que se atenían conmigo ahí), también lucharon después de la película (¡esa vez triunfe!) y por fin era hora de irnos.
¿Qué pasó? Simple. Mi papá no pasó pro mí hasta dos horas después.
Yo le había avisado a mi mamá de que mi iba con mis amigos por no tener clases, ella me dijo que le avisaba a mi papá. Lo hizo. Claro, no les dije cuando me fui a Plaza. Pero les dije cuando acabó la película (seis y media) y ya estabamos pensando en irnos.
Mi mamá le dijo, avisale a tu papá. Cualquiera puede suponer que es para que pasara por mí, ¿verdad? Yo le avise a mi papá. No me acuerdo como fue la comunicación después que ya estabamos afuera de Plaza y mis amigos me decían que me fuera con ellos a la escuela y que me podían llevar al metro y eso. Yo les dije que no, que esperaría a que me contestara mi papá.
No quería irme sin la respuesta al mensaje que le había enviado a mi papá de dónde lo veía, si allá en Plaza, en el metro, la escuela, ¿dónde? Porqué si ya estaba en camino se iba a enfadar si me iba de repente.
Espere... Espere... Espere... Mis amigos obviamente se fueron ya después de las siete. Tenían que irse también a sus casas. Yo estaba tranquila. Cuando dieron las siete y media me dije que ya no vendrían por mí. Obviamente. Entonces solo me quedaba esperar... otra hora.
Primero estuve un tiempo todavía afuera, después entré.
Estaba triste. Estaba asustada. Estaba enojada conmigo misma. Me echaba la culpa. ¿Por qué no me fui con mis amigos? Todavía era hora para irme por mi cuenta, obviamente yo había causado problemas pormi dependencia hacia mis padres. Yo había sido la tonta. Yo y solo yo.
Así pensaba en esos momentos.
Cuando por fin llegaron por mí y subí al auto, sabía que estaban enfadados. No me atreví a hablar. Me mordía la parte interior del labio tratando de no llorar, aunque unas lágrimas escaparon de mi control. Solo debía procurar que no se dieran cuenta.
Y cuando llegamos a casa, mi mamá me sorprendió diciendo exactamente lo que pensaba. Sabía que me echaba la culpa, que estaba asustada por lo tarde que llegaban por mí, que en realidad ella estaba enfadada con papá por no haber pasado por mí aún cuando fue avisado de donde estaba, por no haberme dicho nada aunque yo le pregunté. Que sabía que estaba confundida.
Obviamente lloré. Lloré controlandome, pero lloré.
Entonces, mi papá sí estaba enfadado conmigo. Por supuesto.
Probablemente porque mamá estaba enfadada con él.
Él ama a mi mamá más que a nadie en este mundo, más que a nosotros. Ahora que había puesto a mamá en su contra, estaba enojado. Por supuesto, no lo diría. Solo estaba enojado por no haberle dicho cuando me había ido a Plaza y avisado.
Por supuesto.
Que no reconociera su culpa fue lo que elimino la mía.
Idiota.
Yo me sentía lo suficientemente mal y mi mamá también había calmado mi culpa, pero él era un terco.
Y seguía enfadado al día siguiente.
Cosa horrible, porque para mi era día libre oficial en la escuela y también para mi papá en el trabajo. Tenía miedo de quedarme a solas con él.
Gracias a dios no fue así.
Fui a casa de abue (algo más tarde de lo que me hubiera gustado) y me quede ahí todo el día hasta al noche, y al volver como todavía estaba arreglando la casa (cambio la tele de lugar y tuvo que mover muchas cosas) tuve la oportunidad de desaparecer un rato en mi cuarto. No quería estar en el mismo lugar que él porque hacía que mi corazón doliera.
Na, para el final de la noche ya estaba un poco más calmado. Me dejó ver anime, mamá llegó mientras tanto, ella subió a hacerse las uñas, él se puso a jugar xbox y yo continué leyendo mi libro.
Todos tranquilos... .